Por Micaela Osorio
Elke Karsten, jugadora de la Selección Argentina de handball, con tan solo 28 años ya está entre las tres máximas anotadoras de La Garra y es una pieza clave en el equipo desde su debut en 2013. Con una capacidad goleadora innata, la lateral fue quien más convirtió para Argentina en los Panamericanos de 2015 y 2019 y en los últimos tres mundiales.
Al igual que su hermana mayor Heidi, Karsten empezó a jugar al handball a los siete años en la Asociación Alemana de Quilmes, en donde su primer entrenadora fue Paula Álvarez, quien aseguró que desde sus primeros años era una jugadora prometedora: “Elke marcaba muchísima diferencia con las chicas de su edad en todo sentido, resolvía todo de manera super sencilla, hacía cosas naturalmente y con facilidad, lo que para su edad eran un montón. La realidad es que los que me conocen no me van a dejar mentir, desde el primer día que la entrené dije que tenía muchísimo futuro y la iba a romper”.
Como consecuencia de que su equipo no tenía una arquera definida y se turnaban todas en el puesto, Karsten quería asentarse bajo los tres palos y se lo planteó a Álvarez más de una vez. A pesar de que la entrenadora reconoció que también podría haber sido buena en esa posición, su respuesta fue un no rotundo y la mandó a seguir entrenando como lateral: “Gracias a Dios nos pusimos de acuerdo y siguió en la cancha”.
Con 412 goles en 117 partidos, Elke Karsten se convirtió en la tercera máxima goleadora de la historia de la Selección Argentina, por debajo de Manuela Pizzo y Luciana Mendoza. De todas formas, sus números cumplen con las expectativas que generó de joven. En la categoría cadetes -14, 15 y 16 años- Karsten ya estaba en un nivel altísimo y era indispensable en el equipo. Álvarez recuerda un partido contra INEF (actual San Fernando), un rival directo de Quilmes por el ascenso, en el que desde el inicio le salieron con marca personal para intentar frenar a la gran goleadora, pero no fue suficiente. Karsten cerró el partido con 19 tantos y luego aportó en la categoría juveniles para que su club quede puntero de la tabla general y se acerque al ascenso.
Eduardo “Raqui” Peruchena, ex entrenador de La Garra, también comentó que el talento de Karsten era admirable desde temprana edad, ya que la entrenaba en el plantel Sub-20 y en el Mayor al mismo tiempo, convencido totalmente de que era capaz de integrar ambos: “Elke tenía cualidades que la hacían diferente, tenía un brazo con una potencia de tiro, capacidad y variedad de lanzamiento que la hacían una jugadora muy peligrosa”.
Muchos de los goles que anotó la #22 de la Garra fueron en momentos determinantes para la albiceleste, en donde la presión y el nerviosismo podría haberle pesado, pero Karsten demostró estar a la altura en cada ocasión.
En los Juegos Panamericanos de Canadá 2015, La Garra consiguió la deseada clasificación a los Juegos Olímpicos de Río 2016 por primera vez en la historia y con Karsten como protagonista y titular indiscutible. En esa final, Argentina se enfrentó con Brasil, quienes se habían consagrado campeonas del último Mundial y ya tenían asegurado el pasaje olímpico, por lo que, a pesar de haber caído 20 a 25, el segundo puesto les aseguró la plaza olímpica con una destacable participación de Karsten: no solo fue la máxima goleadora de ese partido, sino también de Argentina en aquel torneo.
Peruchena, el director técnico de aquel equipo, dijo que el crecimiento de Karsten se debe en gran parte a que fuera de la cancha y en el vestuario se mantuvo siempre humilde: “Cuando yo la dirigí ella era chica, tenía un perfil bajo, todo lo contrario a lo que es en la cancha, en donde toma más protagonismo. Pero puertas adentro era muy de escuchar, charlar con sus compañeras y prestar atención a lo que le decían las más grandes y esa humildad también la hizo diferente”.
Para ese entonces su nivel ya era extraordinario, en parte gracias a que en 2015, como la liga metropolitana ya no le hacía justicia a su talento, partió a España para jugar en el Málaga Costa del Sol, equipo con el que se consagró campeona de la Copa Andalucía. Paula Álvarez recordó con nostalgia el día en el que Karsten dejó Quilmes: “Todos en el club sabíamos que era inevitable que en algún momento pasara. Por un lado estaba la felicidad de saber que empezaba una carrera profesional haciendo lo que más disfrutaba. Pero también fue duro, porque como persona y jugadora la íbamos a extrañar. Era la mejor de las nuestras, era cambiar la manera de jugar, hacer que otras empiecen a llevar el peso de los partidos”.
Su imparable racha goleadora continuó en el Mundial de España en 2021, en el que una vez más fue la máxima anotadora de La Garra con 43 tantos -seguida por Malena Cavo con 22 goles- y logrando que el conjunto dirigido por Eduardo “Dady” Gallardo obtenga por primera vez en su historia la clasificación a la Main Round y, como consecuencia, la mejor posición de Argentina en Mundiales.
Elke Karsten todavía tiene mucho para aportar a la Selección, y lo está demostrando en los Juegos Panamericanos de Santiago en Chile, donde la lateral ya es la máxima goleadora argentina y busca la clasificación a los Juegos Olímpicos de París 2024.