Dalmira San Miguel
Su color preferido es el amarillo, el de su hija el naranja. Se identifica con un puma, ella con una pantera. Le gusta comer pizza, ella espagueti con mucha salsa y queso. Él prefiere la montaña, ella el mar. Pero hay algo que los une a los dos y es la bici, la cleta, la bicla, la rila o el término más preciso: la bicicleta. Él es Andrea Collinelli, medallista dorado en el olímpico de Atlanta 1996. Y ella es Sofía, una de las 84 representantes italianos en los Juegos de la Juventud Buenos Aires 2018.
Andrea Collinelli, 49 años, es un reconocido ciclista italiano que se destacó en las disciplinas de pista y ruta. Su mayor logro fue el primer puesto que obtuvo en el torneo llevado a cabo en Estados Unidos, en la competición persecución individual. Por otro lado, ganó 7 medallas en campeonatos Mundiales: dos doradas en Mánchester 1996 (Persecución por equipo) y Perth 1997 (P. por equipo). Tres de plata, Bogotá 1995 (P. individual), Mánchester 1996 (P. individual) y Burdeos 1998 (Madison). Dos de bronce, Perth 1997 (P. individual) y Burdeos 1998 (P. por equipo).
En cuanto a Sofía, tiene 17 años y, como su padre, se destaca en la disciplina de ruta. En septiembre se consagró Campeona del Mundo Júnior en persecución con el equipo femenino en el velódromo suizo di Aigle. Y también, en el mismo torneo, se llevó la medalla de bronce por su actuación individual. Va a ser la primera vez que participe de los Juegos Olímpicos.
El equipo italiano de ciclismo también estará compuesto por Avondetto Simón, Dalla Valle Tommaso y Specia Giada. Mientras que la conducción técnica contará con Rino de Candido y Mirko Celestino. “Estoy muy orgullosa de representar a Italia y me espera una nueva aventura ya que corremos de pares en diferentes pruebas”, afirmó la adolescente.
Antes de emprender su viaje hacia Argentina, Sofía habló en diferentes medios nacionales donde comentó: “Esperaba mucho poder participar en este gran evento y estoy contentísima porque había disponible sólo un lugar femenino para el sector de ruta y no fue fácil”.