jueves, noviembre 21, 2024

Las kamikazes cumplieron su sueño dorado

Agustín Loza @agustinloza25

Parque Sarmiento. 5 de la tarde de un sábado soleado. Filas de muchas cuadras de esa gente que se dejó cautivar por esta nueva disciplina y se agolpó de lleno para alentar por estas chicas. El día de gloria para esas jóvenes que soñaron durante mucho tiempo con subirse a lo más alto del podio ante su público.

Esa ilusión nació hace unos años en el mismo lugar. Todo era muy distinto. Eran un equipo que necesitaba solidificarse, no habían competido en el alto rendimiento. La cancha de arena que hoy brilla gracias al olimpismo, en sus inicios estaba en un estado lamentable. Todo era césped, algunas piedras, pero se contrarrestó con algo que nunca se apagó y finalmente se cumplió: el sueño por la medalla dorada.

Así nacieron las kamikazes, apodo que se originó porque las chicas que hoy festejan, no tenían problemas en entrenarse en esos terrenos que les generó muchas lesiones y lastimaduras. A la distancia, todos esos días de dolores y adversidades, tuvieron su premio. En su diccionario ya está grabada a fuego la palabra esfuerzo, porque supieron hacerle frente a todas las piedras en el camino. Ahora deberán adoptar la palabra gloria, porque vencieron a Croacia y se consagraron campeonas olímpicas.

El beach handball es una disciplina moderadamente nueva. Es una mezcla de deporte, destreza y show. A comparación del deporte tradicional, no es necesario picar la pelota, entre otras cosas. Es muy dinámico, pocas veces se para el tiempo. Hay puntos que valen doble, una de las opciones es el lanzamiento con giro de 360 grados que le aporta esa pizca de espectacularidad que llama mucho la atención. Hay música durante el trayecto de los partidos.

Buenos Aires 2018 es el primer gran evento donde está presente esta especialidad. Es una de las actividades fetiche elegidas por los espectadores de los Juegos de la Juventud. Tarde o temprano, también va a acaparar las luces de las citas olímpicas del futuro. Es imposible que esté en Tokio 2020, pero todo parece indicar que en París 2024 tendrá su posibilidad.

Las kamikazes aprovecharon su localía. La atracción del público local por este fue aprovechada por el elenco que comanda Leticia Brunati. Hicieron un torneo de menor a mayor. En toda la competencia perdieron solo un partido. La recta final fue perfecta, incluso pusieron de rodillas al equipo campeón del mundo, Hungría. En la definición por la presea de oro vencieron con mucha autoridad a Croacia por 2-0 (14-10 y 18-16).

Los varones también tuvieron lo suyo, en el mismo día ganaron la medalla de bronce en la previa de la final del beach handball femenino y comenzaron a escribir una jornada que quedará en la historia del deporte argentino.

Finalmente la gloria deportiva se impuso a todo. Los problemas para entrenar que tenían antes, el poco reconocimiento del deporte, incluso durante la competencia tuvieron que afrontar la polémica que se instaló en los medios con su vestimenta, que salieron a aclarar ellas mismas. Supieron cómo hacerse fuerte ante estas adversidades y ya escribieron una de las páginas más felices del handball argentino.

La euforia predomina en el Parque Sarmiento. La emoción se sube con estas chicas al primer escalón del podio. La bandera argentina está más alta que las demás, un poco más cerca del cielo. Los recuerdos de aquellas jornadas de entrenamiento duro quedaron en el pasado.

El futuro de este deporte también representa desafíos para este equipo que promete seguir cumpliendo sus objetivos, así como lo hicieron durante esas primeras prácticas tan difíciles que ya tuvieron su merecida consagración. El presente indica que las Kamikazes cumplieron algo que anhelaron siempre y son campeonas olímpicas.

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