Por Franco Luis Bonini
El 6 de octubre de 2022 sucedió uno de los momentos más tristes en la historia del fútbol argentino. En La Plata, Gimnasia y Boca se enfrentaban por la fecha 23 de la Liga Profesional, pero esa noche, sólo se pudieron jugar 9 minutos de partido, ya que ocurrieron incidentes fuera del Juan Carmelo Zerillo entre los hinchas que no pudieron ingresar al estadio y la policía, que no los dejaba entrar porque ya estaba lleno.
El partido se detuvo cuando los gases lacrimógenos que habían tirado afuera llegaron dentro del campo de juego y le impedían a los futbolistas seguir disputando el encuentro. El árbitro Hernán Mastrangelo decidió detenerlo y los jugadores se marcharon al vestuario por falta de garantías de seguridad y porque había muchos simpatizantes afectados por la situación.
Varios hinchas del “Lobo”, que estaban dentro del estadio, tenían irritación en los ojos y dificultades para respirar con normalidad. Intentaron salir de la cancha pero las puertas habían sido cerradas. Sin embargo, el club permitió el ingreso al campo de juego para que los médicos pudieran asistir a los hinchas que habían sido afectados por los gases.
Afuera del estadio, tampoco había paz, ya que la situación se complicó debido a la represión policial contra los hinchas del club platense. César “Lolo” Regueiro, un hincha de Gimnasia de 57 años, falleció por un paro cardiorrespiratorio cuando intentaba escapar de los disturbios. Dos semanas después de este suceso, el partido se completó y fue victoria de Boca por 2-1
A dos años de la fatídica noche, los familiares de “Lolo” anunciaron que harán una marcha el lunes para hacer un nuevo pedido a las autoridades y que la causa no sea olvidada. El mensaje se difundió en las redes sociales: “Convocamos el 7 de octubre a una marcha pacífica, ya se cumplen 2 años y todos los imputados apelaron al Tribunal de Casación. 2 años sin Lolo, 2 años sin respuestas, 2 años sin justicia”.