Por Iñaki Urretavizcaya e Isidoro Doumont
Para alguien que no mira constantemente fútbol argentino, podría parecer extraño que el equipo puntero tanto de la Liga Profesional como de la tabla anual, y que fue finalista de la Copa de la Liga con un gran nivel de juego, haya peleado hasta último momento el descenso en 2023. Este es el inédito caso del resurgimiento de Vélez Sarsfield.
En 2023 Vélez tuvo un año muy sufrido. Problemas dirigenciales que llevaron a elecciones, cinco cambios de entrenadores que no ayudaron a plasmar una idea de juego, dos interinatos de Marcelo Bravo, amenazas a los jugadores por parte de la barra brava, coqueteos con el descenso y salidas forzadas de jugadores llevaron al club de Liniers a pasar por una crisis institucional.
Alexander Medina se fue después de perder ante Boca en la fecha 5 de la Liga Profesional 2023. Tuvo buen desempeño en la Copa Libertadores 2022, donde eliminó a River y Talleres, llegando a semifinales. En su paso por el Fortín dirigió 40 partidos, con 11 victorias, 13 empates y 16 derrotas.
Ricardo Gareca asumió en marzo y dirigió 12 partidos, ganó uno, empató 7 y perdió 4. Durante esa época los hinchas de Vélez fueron a la sede a protestar por la gestión de Sergio Rapisarda y el desempeño del equipo. Sin embargo, el pueblo velezano defendió a Gareca.
Sebastián Méndez llegó al club en junio y dirigió los últimos siete partidos de la Liga Profesional de Fútbol, en los que sólo ganó uno, empató 2 y perdió 2. En la fecha final en la que perdió con Huracán, la barra ingresó y amenazó a los jugadores. Esto desencadenó en que varios jugadores del plantel, como Gianluca Prestianni, pidieran ser transferidos en el mercado de pases. En la Copa de la Liga, ganó 6, empató 4, perdió 4 y se salvó del descenso en la última fecha al vencer a Colón por 3-1.
La barra volvió a amenazar al plantel y, como en la anteúltima fecha Vélez todavía no estaba salvado del descenso, Méndez muy enojado le pegó 14 piñas a la pared del vestuario. El DT fue tan pasional con su trabajo que terminó muy agotado mentalmente. A mitad de torneo, el 13 de noviembre de 2023, asumió como presidente Fabián Berlanga, con el 58% de los votos, y reemplazó a Rapisarda. Méndez dejó el cargo en diciembre por no ser del agrado de la nueva dirigencia.
El inicio de 2024 cambió todo en los planes de Vélez, que resurgió como el ave fénix entre las cenizas cuando asumió Gustavo Quinteros el primero de enero y le dio un aire esperanzador que todavía perdura con el pasar de los partidos. Desde que llegó dirigió 36: ganó 23, empató 7 y perdió 6. También logró que el equipo llegara a una nueva final de la Copa de la Liga, donde perdió ante Estudiantes. En la Liga Profesional desde la fecha 5 no conocen la derrota y suman un invicto de 12 partidos.
El renacimiento de Vélez también se debe a la presencia de jugadores jóvenes que salieron de las inferiores del club como Valentín Gómez, Joaquín García, Christian Ordóñez, Thiago Fernández y Alejo Sarco. Otros llegaron en 2024 a aportar velocidad y verticalidad en el juego como Agustín Lagos, Aarón Quirós y el experimentado Claudio Aquino, que llegó desde Cerro Porteño para dar manejo en el mediocampo.
En este nuevo Vélez se ve un planteo mucho más ofensivo, con un juego rápido, enfocado en los laterales de la cancha, con un mediocampo que llega mucho al área rival. La fórmula de Quinteros y los goles de Brian Romero son parte de un proyecto sólido que esperanza a los hinchas a repetir aquella hazaña de la Copa Libertadores de 1994, pero 30 años después.