Por Francisco Vico
El básquet en Argentina llegó a su mejor momento durante los Juegos Olímpicos de Atenas 2004, cuando la Generación Dorada logró el oro luego de vencer en la final a Italia y en las semifinales a Estados Unidos, único país que ganó esta competición desde la inclusión de jugadores de la NBA en 1992. La Generación Dorada llegó por la creación de la Liga Nacional en 1985, que ayudó a federalizar este deporte y a que surgieran más talentos del interior del país, como Andrés Nocioni que nació en Santa Fe, o Fabricio Oberto, oriundo de Córdoba.
Los logros de la Selección llegaron en los 2000, cuando estuvieron en las instancias finales de los torneos más importantes, como el segundo puesto en el Mundial de Indianápolis 2002 y el bronce en Beijing 2008. Aunque en febrero de 2023 el seleccionado argentino perdió 79-75 ante República Dominicana por las eliminatorias de la Copa del Mundo y quedó eliminado del Mundial de ese año a disputarse en Indonesia, Japón y Filipinas. Una posible causa es el bajo nivel y la desorganización política que sufrió la Confederación Argentina de Básquet (CABB) en los años recientes, que hizo que el rendimiento de la Liga Nacional baje de forma considerable, tanto que se llegó a un punto en el que hay cada vez menos jugadores del plano nacional en la selección, Tayavek Gallizzi de Instituto de Córdoba es el único que disputó las ya mencionadas eliminatorias.
Debido a la mala situación económica que atravesaba Argentina con la devaluación del peso de 39%, a los jugadores les favorecía ir a jugar a otro país. Franco Balbi, que fue a jugar al Flamengo de Brasil, explica que “cobrar en una moneda extranjera, con la realidad de Argentina, te da una estabilidad diferente”. Las ligas de Chile, México y Uruguay, por lo económico, son un destino atractivo para los jugadores argentinos, pero en nivel son más parejas o peores que la Liga Nacional.
En 2008 asumió en la presidencia de la Confederación Argentina de Básquet, Germán Vaccaro, que en noviembre de 2022 fue culpado de administración fraudulenta por los seis años que estuvo en el cargo. Para su salida en abril de 2014, tuvieron que intervenir los jugadores de la Generación Dorada, que amenazaron con no presentarse al Mundial de España 2014. En una conferencia de prensa comandada por Luis Scola, pidieron un cambio en la Confederación, ya que tenían deudas con los jugadores. “Nosotros pedimos un cambio profundo, no solo en lo personal, sino también en el manejo institucional de la CABB. Es importante, es necesario, hay que hacerlo ahora mismo. No buscamos el beneficio personal. La deuda nuestra no tiene casi importancia con lo que estamos pidiendo”. Los jugadores pidieron por la regularización económica debido a que el déficit llegaba a los 33 millones de pesos. Luego de la renuncia de Vaccaro en 2014, Federico Susbielles tomó el cargo, con el respaldo de las máximas figuras de la Generación Dorada. El bahiense dijo en su momento que la situación no era solamente culpa de Vaccaro, que debía haber un grupo detrás. Personas como Daniel Zanni, que fue el presidente por unos días luego de su renuncia, y Fabian Borro, que fue uno de los vices de Vaccaro, también eran culpables.
Además de regularizar la situación económica, Susbielles buscó mejorar el rendimiento deportivo del básquet nacional, quien extendió los torneos organizados por la CABB, ordenó la Liga Federal y organizó un proyecto para hacer acuerdos con la NBA. Luego de una gran gestión para el exbasquetbolista nacido en Bahía Blanca, en 2019 decidió presentarse como candidato a intendente de la ciudad del sur de la provincia de Buenos Aires, y dejó de lado su labor en la Confederación. A partir de diciembre de ese mismo año, posterior al segundo puesto conseguido por la selección argentina en el Mundial de China, Borro fue electo presidente de la Confederación Argentina de Básquet luego de que Susbielles se bajara de la candidatura porque su lista no llegaba a los 21 delegados para postularse. Borro se había hecho cargo del club Obras Sanitarias, la Federación Metropolitana (FEBAMBA) y la Asociación de Clubes (AdC), que organiza la Liga Nacional y la Liga Argentina (segunda división). Cómo jefe de la AdC, intentó mejorar el marketing y difusión de la máxima categoría del básquet nacional, se comenzaron a televisar la mayor cantidad de partidos posibles, se cambió el formato de la competencia, y por esto comenzaron a haber partidos todos los días, al estilo NBA. También quitó el cupo de extranjeros para reducir costos en los equipos. Para ayudar con la televisación de todos los partidos, recurrió a la creación de Basquet Pass, una plataforma de streaming que cubre desde la Liga Nacional hasta el Torneo Federal, y si bien era una propuesta muy interesante, no terminó de servir por el pésimo funcionamiento, y que por el mismo los hinchas se quejan que no se podían ver los partidos sin que se trabe.
Otro de los principales dirigentes involucrados en la caída del básquet argentino fue Horacio Muratore, ex presidente de la CABB y de la FIBA (Federación Internacional de Básquet Asociados), que en su momento también impulsó la campaña de Germán Vaccaro. Además fue clave en la elección de Fabián Borro en diciembre de 2019, y se pasó por alto el hecho de que ya había sido parte del proceso de seis años al frente de la CABB de Vaccaro, penado a devolver 80.000 dólares de su gestión por administración fraudulenta de la cual se le condenó.
Agustín Morales, base que jugó la temporada 2022/23 en San Lorenzo en la Liga y disputó la Liga de Desarrollo. Contó que si bien le gusta mucho jugar al básquet, hoy lo ve difícil ya que económicamente otros trabajos le rinden más, como un emprendimiento que tiene junto con su hermano, en el cual venden elementos de la marca Apple, y es por eso que no sabe si va a continuar en el máximo nivel. Por eso que muchos prefieren emigrar al extranjero, a las ligas de México, Chile, Uruguay y Brasil.
La mala situación financiera del país se repercute en los clubes, algo que hace que cada vez menos extranjeros vengan a jugar a la Liga. Aunque se haya tratado de aumentar la cantidad cuando se quitó el límite. Esto afectó bastante ya que fueron una gran fuente de talento para los equipos, por ejemplo, entre las 10 marcas de más puntos que se metieron en un partido, el único argentino es el histórico Héctor Campana que aparece dos veces en la lista. Mientras que el resto son los uruguayos Wilfredo Ruiz (dos veces) y Horacio López, junto con cinco estadounidenses. El que más anotó en un partido, Andrew Moten, Joe Harvell (también dos veces), Joseph Bunn y John Eubanks. Por otro lado, el MVP de la Liga Nacional, o jugador más valioso de la temporada, tiene una gran cantidad de jugadores argentinos, cómo Pichi Campana, que ganó este premio en cuatro ocasiones, o Leo Gutiérrez, que también lo ganó cuatro veces. Sin embargo, hay cinco extranjeros: los estadounidenses David Jackson (2008/09), Justin Williams (2015/16), Dar Tucker (2016/17), Eric Anderson Jr (2021/22) y el cubano Yoanki Mencia (2022/23). También hay un premio que destaca al mejor jugador extranjero del año, donde se puede notar que los mejores jugadores vienen de Estados Unidos, ya que 20 de los 30 ganadores son de ahí.
Se esperaba que la Liga Nacional iba a crecer debido a los buenos rendimientos de la selección con la Generación Dorada, pero no terminó de pasar, y se terminó de confirmar cuando el combinado nacional no pudo entrar al Mundial de Indonesia, Japón y Filipinas 2023.