Agustín Loza
Los transexuales ganaron una gran cantidad de derechos en los últimos años, como el de poder casarse con personas del mismo género, o que puedan tener la libertad de elegir su identidad sin importar la condición biológica. Los tiempos cambiaron, y para bien, pero todavía hay un grupo de gente que se quedó en el pasado.
Uno de los avances que está en proceso es el de la práctica del deporte profesional. Que es una de las cuestiones que por vacíos legales quedaron estancadas. Hay muchísimos casos en los que hay confusiones incluso en las federaciones, por el temor de que exista alguna ventaja.
Ante este panorama, hubo consultas con distintos profesionales de la salud para aclarar las dudas ante estos casos tan controversiales. Casi todos coincidieron en que anatómicamente no existe ningún beneficio para los competidores si incluyen a un transexual en una prueba deportiva, ya sea de manera individual o colectiva.
El Comité Olímpico Internacional indica que para que una mujer que nació siendo hombre compita con el género femenino debe tener un límite de 10 nanolitros de testosterona por mililitro de sangre. Ni siquiera sugieren operaciones para extirparse sus genitales con los que nació.
El licenciado Manuel Ponce es especialista en kinesiología y en educación física, tiene una maestría en Medicina Deportiva y trabaja en la Secretaría de Deportes de la provincia de Jujuy. Aseguró que tuvo la posibilidad de verificar los análisis de personas transexuales que se acercaron a realizarse chequeos en el centro de estudios que tiene y llegó a la conclusión de que tenían tejidos algo más trabajados, ya que son más detallados por cuestiones estéticas porque tienen un cuidado mayor al de los demás.
Agregó que todas las personas pueden realizar el deporte que deseen, sin tener riesgo alguno y que no hay capacidades que sean predeterminadas que definan si un deportista tiene ventaja sobre otro, sino que lo que es fundamental es el entrenamiento constante.
“La sociedad a veces discrimina o ignora ciertas cosas porque no está preparada. Todos tenemos la capacidad y la libertad de teneruna actividad física adecuada”, comentó Ponce. Entonces, la conclusión es que hay cierto prejuicio de personas ajenas a la medicina, que ante el desconocimiento, hace caso omiso a lo que indica la ciencia. De hecho, el licenciado afirmó que hay deportistas frustrados porque no se animan a anotarse por el miedo a ser rechazados.
Cerró su conclusión con una sugerencia reglamentaria y ética. En las federaciones deberían haber reglamentos que sean claros porque de esa manera le dan un protagonismo a los transexuales que nunca tuvieron. Añadió que es antihumano prohibir la práctica a alguien por su elección sexual y comparó esos casos con los problemas que se generan en las escuelas cuando un chico es obeso y no le permiten hacer ciertas actividades.
El doctor Oscar Perini es jefe de Clínica Médica y del Departamento de Endocrinología del Hospital Guillermo Paterson de la ciudad de San Pedro de Jujuy. El profesional aclaró que los transexuales deben inyectarse hormonas para practicar deportes; si quieren ser mujeres, tendrán que colocarse estrógenos, y si el deseo de una persona es ser varón, necesitará testosteronas. No tienen problemas en hacer cualquier tipo de actividad física.
Además coincidió con el hecho de que no hay inconvenientes biológicos con la práctica deportiva y que a algunos les genera rechazo que los trans sean federados en alguna disciplina. “La gente cambió, hoy tiene la mentalidad más abierta. Cada ser humano decide cómo vivir y eso a algunos no le gusta”, sentenció.
El doctor Perini afirmó que no existe ninguna ventaja física en una competición porque los niveles de fuerza no varían según el género, es una cuestión de entrenamiento. También hizo un análisis conciso en el que apeló al sentido común. “Si un varón quiere ser mujer, tratará de desarrollar movimientos que lo identifiquen con el género femenino, tendrá más delicadeza”.
La doctora Sandra Magirena es especialista en ginecología. Coincidió con que todos pueden hacer cualquier disciplina, incluso hay algunas actividades que permiten las conformaciones de equipos mixtos, como en la FAFI, donde los niños y las niñas pueden ser integrantes de un mismo plantel sin ninguna restricción.
Aunque declaró que en los deportes de alto rendimiento hay grises que no permiten sacar una conclusión exacta, porque hay hormonas que están dentro de las sustancias dopantes pero están contempladas con ciertas limitaciones del COI para evitar el exceso de las consumiciones. “Personalmente no creo que haya diferencias entre hombres, mujeres o trans, eso depende más del entrenamiento que del género”, manifestó la doctora Magirena.
La doctora Cecilia Calvar es la jefa de Endocrinología del Hospital Fernández, comentó que después de un año de tratamiento hormonal en algunas asociaciones americanas permiten que las mujeres transexuales hagan deportes de impacto con mujeres. Hay ciertas contemplaciones pero finalmente hay igualdad de género.
Subrayó que para pensar si existen ventajas en las disciplinas de alto rendimiento hay que tener en cuenta que no hay superioridad física por la parte hormonal sino que lo que inclina los niveles de habilidad para la práctica deportiva son la genética, las destrezas y otros factores.
La reflexión general de los profesionales de la salud fue que el problema para que los transexuales practiquen deportes de alto nivel viene más por lo ideológico. Físicamente no existen ventajas y que el trabajo que debería hacerse es en lo social, porque el tiempo pasa y con ello hay evoluciones de pensamiento. Pero lo que aún no cambió, fue la estigmatización que sufren los transexuales en ciertos sectores de la ciudadanía.