Por Juan Bautista Zárate
Ulises Cazau tiene 19 años y forma parte de la Selección Argentina de Natación. En los últimos Juegos Panamericanos Junior en Asunción consiguió la medalla dorada en los 4×100 metros relevo combinado masculino y la plateada en los 100 metros mariposa y en 4×100 relevo combinado mixto.
En 2023 tuvo que decidir si apostar por la natación o priorizar el estudio. Como era su primer año compitiendo para la Selección y ya tenía objetivos planeados para el siguiente año, decidió seguir con el deporte. No obstante, para sus primeros torneos tuvo que financiarse los gastos, así que gracias a su fanatismo por la cocina vendió rifas y pizzas caseras para conseguir el dinero: “Salió bastante bien y las redes me ayudaron mucho”.
-¿Cómo surgió la idea de vender pizzas y rifas?
-En el ámbito es común. Lo de las pizzas fue la excepción porque las hacíamos nosotros, pero los chicos de mi club, que ahora están por viajar al Nacional de San Juan, venden alfajores. Fue una propuesta que estuvo buena. También te ponés más en compromiso con el torneo porque lo vivís de una manera distinta.
-¿Y obtuviste el resultado que esperabas?
-Por suerte salió bastante bien. Ayudó la viralización en redes. Llegué hasta puntos que no me hubiera imaginado. Fueron las razones por las que viajé a un torneo en Australia en el que gracias a ello se me abrieron más puertas para la natación.
-¿Te seguís financiando los torneos o tenés apoyo del ENARD, por ejemplo?
-Los viajes y torneos internacionales este año, que son los grandes gastos, me los financió el ENARD y la Secretaría de Deportes. Las competiciones locales, que no representan un presupuesto elevado, las bancamos con mi familia.
-¿Además contás con algún sponsor?
-Sí, con eso estoy bastante relajado. Vadox, que me acompaña hace un año, me brinda las mallas de competición, que son bastantes caras, y las antiparras y el gorro. Son gastos grandes que no tengo.
-¿Ves en las redes una posibilidad de conseguir más patrocinadores?
-Las redes son algo que todavía se me hace difícil de entender. Me parece que es una buena salida que complementa lo que yo hago y hoy hay mucha gente que se sustenta por estos medios. La propuesta es seguir con esto para que llegue alguna marca, aunque es difícil porque en la natación no hay muchas.
-Estás grabando vlogs de tus viajes y entrenamientos…
-El objetivo es compartir lo que le sirve a cada uno para que le llegue a los demás, que no vean solo el resultado sino el proceso. En los torneos hay que subir cosas pero también trato de salir e ir construyendo una imagen en la que no sea solo un nadador, sino que sea Ulises.
-¿Y cómo te llevás con la parte “mala” de las redes, los comentarios de odio de las personas?
-Trato de ser lo más neutral posible, nunca llegué a una etapa de “hate”. Trato de rodearme de las personas que me importan y escucharlos a ellos. Es muy fácil hablar detrás de una pantalla y no te tiene que influir la opinión de alguien que no te conoce ni conocés.
-¿Creés que las personas aprendieron a expresarse luego de la magnitud del hate que recibió Delfina Pignatiello?
-Sí, quedó algo marcado en Argentina a partir de esto, no sé si ahora hay hate. Lo de Delfina fue bastante masivo y una lástima, hay que aprender y que no vuelva a pasar. Un montón de gente lo tiene en cuenta y lo mejor es aprender del pasado para entender el presente.
-¿Qué se siente representar al país?
-Es algo muy bueno, no sé si encuentro las palabras para describirlo. Es un país que tiene cosas re lindas y poder representarlo y tratar de dejarlo en el mejor escalón posible está buenísimo.
-¿Sentís la presión de representar a un país entero o simplemente te enfocás en vos?
-Al principio sí, lo llevaba a un nivel que me afectaba en el rendimiento. Hoy, al repetirse y conocer más, es algo positivo, que me suma y no cargo con ese peso.
-¿Cuáles son tus objetivos a corto y largo plazo?
-A largo plazo son los Panamericanos de Lima 2027, los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028 y los próximos mundiales. A corto es el día a día, en cada entrenamiento cumplir las rutinas, dar el cien por cien diario y tratar de mejorar las marcas.
-¿Cambia la preparación de un torneo internacional a uno en Argentina?
-Cambia pero no tanto, porque para clasificar a un mundial tenés que meter tu mejor marca. A veces la preparación es la misma porque uno tiene que estar a la misma altura en ambos torneos. Si bien en el país lo podés ganar más fácil, no es tan importante el ranking, sino la marca.
-Entrando en tus inicios, ¿cuándo empezaste a nadar?
-Arranqué hace muchos años, pero con cero expectativas. Era más para defenderme en el agua. Corría relevos o postas americanas con mis amigos cuando tenía 11 o 12 años y era bastante recreativo.
-¿Y cuándo quisiste dedicarte al alto rendimiento?
-En 2023 tuve mis primeros torneos con la selección con buenos resultados en el Sudamericano Juvenil y a nivel nacional. Combinaba estudio y deporte, y no sabía con qué continuar. Por lo que empezamos a proyectar para el 2024, prioricé la natación y el alto rendimiento.
-Igualmente estás estudiando…
-Sí, ahora estoy estudiando Ingeniería en Ciencia de Datos de manera virtual. Voy a un ritmo más lento, pero me parece que puedo tener un respaldo para cuando termine con la natación. También está bueno en el día a día nutrir la cabeza con algo alejado.
-¿Y tenés algún pasatiempo cuando no hay competencia?
-Me gusta cocinar y organizar juntadas. No soy de ver series ni películas. Si tengo tiempo sí, pero me gusta pasar esos ratos con gente.
-¿Cuánto tuviste que dejar para dedicarte al alto rendimiento?
-Un montón. El ejemplo más normal es no haber ido de viaje de egresados. No salgo a bailar con mis amigos, pero suelo juntarme con ellos. Luego no tuve muchas limitaciones o por lo menos no las sentí así.
-¿Tu familia te supo entender y acompañar?
-Vengo de una familia que no tenía relación con la natación, entonces fue algo nuevo para todos. Siempre me entendieron y me acompañaron bien.
-¿Contás con equipo de profesionales como psicólogo, nutricionista y preparador físico?
-Sí, en mi cuerpo técnico está mi entrenador, que también es un amigo; la profe de yoga, la nutricionista, el preparador físico, el masajista y un psicólogo deportivo. Trato de que todos estén conectados aunque no se conozcan. Es un lindo equipo de trabajo.
-¿Cómo te ayuda tu profesora de yoga para relacionarlo con la natación?
-La profe de yoga también es de natación. Además de todo lo que trae de posturas y ejercicios de flexibilidad, también tiene una parte de meditación a través de la respiración, y partes de visualizaciones previas a los torneos que yo lo aplico y está bueno.
-¿Creés que hay diferencia entre un nadador que tiene un equipo así con uno que no lo tiene?
-Nunca me lo puse a pensar pero es muy leve la diferencia. Me parece que no está mal que no tengas, no sé si estás en una posición de ventaja, pero es un gran complemento. La parte mental es importante cuidarla porque en una carrera juega bastante porcentaje, más allá del rendimiento físico.



