sábado, octubre 4, 2025

De México 86 a Qatar 22: la adaptación de los campeones del mundo al fútbol argentino

Por Matias Cuesta y Magalí Robledo

Con la vuelta de Marcos Acuña, Germán Pezzella, Gonzalo Montiel, Leandro Paredes y Ángel Di María son seis los campeones del mundo en Qatar 2022 que juegan en el fútbol argentino. Excepto Montiel, quien estuvo cuatro años en Europa, la mayoría de ellos jugaron más de siete en el Viejo Continente; caso especial el de Di María, quien pasó 18 temporadas en la élite del fútbol. También desde hace siete años, el fútbol argentino cuenta con la presencia de Franco Armani.

La presencia de tener campeones del mundo le da un salto de calidad al fútbol argentino. Le otorga más visibilidad al resto de futbolistas, más en una liga de 30 equipos en la que hay más de 650 jugadores en la primera división. Julio “El Vasco” Olarticoechea, campeón del mundo en México 86, comenta: “Es buena la vuelta de campeones del mundo al fútbol argentino, lo hace mucho más competitivo”.

Los campeones del mundo en Qatar se encontraron con que el fútbol argentino está en un nivel alto de preparación y dedicación. Tienen el desafío de adaptarse a un fútbol con otro ritmo y la mirada permanente de los hinchas, quienes los tratan con la misma exigencia que a cualquier otro.

No es la primera vez que un grupo de jugadores, luego de ser campeones del mundo con la Selección Argentina, regresa al fútbol local. Algo así ocurrió luego del título obtenido en México 1986, con la diferencia de que algunos jugadores ya jugaban en el país a la hora de ser convocados. “Después del título en México, me impactó que no podía caminar por las calles. Fue algo impresionante, me sentía Maradona”, cuenta Héctor “El Negro” Enrique, pieza fundamental del equipo que dirigió Carlos Bilardo, en referencia a su proceso de adaptación luego de ser campeón del mundo.

Las hinchadas en Argentina siempre jugaron un papel importante en el fútbol. Si bien ahora el insulto cobró mayor medida y no se contempla ni se toma en cuenta si es campeón del mundo, ¿cómo era antes? “Fui respetado y hasta aplaudido por la gente de Boca, mientras yo jugaba en River. Siempre fui bastante querido porque la gente sabe cómo se maneja uno dentro de la cancha y afuera en la vida”, agrega Enrique, que jugó en Boca y River. Pero también existe la otra cara de la moneda, en la que los jugadores se sienten más exigidos. Lo recuerda Olarticoechea, exjugador de Racing, River y Boca: “Te exigen de otra manera los hinchas, tenés que demostrar que sos campeón mundial y dar un plus. A mí me costó”.

El fútbol argentino no es nada fácil, menos después de jugar en Europa. Hasta algunos creen que la exigencia es mayor. “A los jugadores que vinieron ahora les cuesta. No es fácil nuestro fútbol. Sobre todo en River, que trajo varios, tienen buenos partidos, pero hay otros que no”, analiza Olarticoechea sobre el presente de los jugadores del Millonario, donde él pasó entre 1981 y 1984. Par el Negro Enrique, la clave es la parte física de los jugadores, como el caso de Paredes y Di María: “Si están bien físicamente y no tienen lesiones graves pueden jugar tranquilos”.

La trayectoria, la experiencia y el cuidado de los futbolistas campeones del mundo en Qatar son fundamentales ya que no sufrieron lesiones graves a lo largo de sus carreras. Todavía siguen escribiendo capítulos en los libros del fútbol argentino.

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