Por David Correa y Nahiara Toledo
Luciano De Cecco fue el líder del seleccionado argentino ante Finlandia por el estreno del Mundial de Vóley 2025, encuentro en el que los dirigidos por Marcelo Méndez remontaron una desventaja de dos sets y lograron una agónica victoria en el tiebreak. Para el armador santafesino fue un festejo doble en tierras filipinas: se convirtió en el voleibolista con más presencias en la cita mundialista al disputar 6 ediciones.
Italia 2006 fue la primera aparición del argentino con tan sólo 18 años. Desde ese entonces, participó en Japón 2010, Polonia 2014, Italia y Bulgaria 2018, Polonia y Eslovenia 2022, sin interrupciones. En 2024 decidió dar un paso al costado de la Selección tras anunciar su retiro una vez finalizados los Juegos Olímpicos de París, pero decidió volver a vestir la camiseta albiceleste para representar al país en el Mundial, tras haber sido operado a mediados de abril por cálculos renales que lo obligó a perderse la Liga de Naciones de Voley de este año.
Sin embargo, a pesar de todo el esfuerzo físico y mental, para el oriundo de Santa Fe no todo es color de rosas. En la previa del torneo se sinceró con algunos medios locales y sacó a luz su decepción por no tener la visibilidad en su tierra natal. “Estoy contento, por supuesto, pero no más que eso. De hecho, en Volleyball World me hicieron una entrevista y le dieron mucho énfasis, pero en mi país siento que a casi nadie le importa, así que también me lo tomo con mucha calma”, afirmó el ex capitán del conjunto nacional.
Una vez finalizado el encuentro frente a los finlandeses, las redes oficiales de la Federación Internacional del Vóley (FIVB) llenaron de elogios al argentino con publicaciones, videos, textos y menciones, mientras que en la cuenta de la Federación del Vóleibol Argentino apenas le dedicaron un posteo de Instagram.
A pesar de no recibir el cariño y reconocimiento correspondiente por parte del pueblo argentino, De Cecco encontró el lado positivo a la problemática al afirmar que pasa inadvertido. Por lo tanto, esto le permite enfocarse en los desafíos propios y colectivos, siempre con la Selección como prioridad.