Por Tiago Caputo
Francisco Albarracín, head coach de La Plata Rugby Club (LPRC) luego de terminar una reunión laboral mientras toma un café relajado tras una temporada larga, pero planificando lo que se viene después de conseguir el ascenso al URBA Top 12. LPRC finalizó el certamen con 108 puntos, sacándole el liderato a Los Tilos, clásico del canario, en la anteúltima fecha y jugará el Top 12 tras dos años de ausencia.
Albarracín tuvo su primera experiencia como head coach de un plantel superior, se formó en La Plata Rugby, debutó en primera como media scrum y jugó 14 años en la primera del canario.
-¿Qué análisis hiciste de la temporada que terminó en el ascenso?
-Fue una temporada dura, nos costó. El tercer descenso del club o de cualquier institución golpea mucho. Sufrimos un recambio grande de jugadores y entrenadores, tuvimos un andar irregular al principio de año, pero pudimos terminar el año en un buen nivel rugbístico, mental y físico.
-¿En qué facetas del juego mejoraron a lo largo del año?
-Mejoramos en la obtención, en el scrum y en el line, durante el año el contacto en ataque fue irregular, pero en los últimos seis o siete partidos, tuvimos un muy buen nivel de juego, con un ataque dinámico, como a nosotros nos gusta. Creo que en esas facetas en el juego, el equipo dio un salto de calidad.
-¿Cómo fue la preparación en las semanas entre partido y partido?
-El lunes los jugadores hacen un regenerativo o hacen gimnasio. Si te toca hacer rugby, lo hacemos sin golpearnos demasiado, para planificar la estrategia del partido que viene. Los martes es el día de más alta intensidad, hay contacto físico y se entrena la defensa. Mientras que los jueves bajamos un poco la intensidad y entrenamos el ataque de cara al partido.
-¿Qué detalles ajustaste antes de la anteúltima fecha frente a Los Tilos, partido que definía el primer ascenso y el campeonato?
-Se sabía que era una final, había que jugarla como tal, con poco ritmo de juego, poca dinámica, con mucha táctica y mucho pie al fondo. Otra clave fue la defensa, que fue muy buena porque ellos en el contacto eran mejores y nosotros en ese aspecto logramos frenarlos, anularlos y llevarnos el triunfo.
-¿Qué sentiste después del último partido contra Pueyrredón?
-Alivio, una emoción muy grande, me acordé de todo el proceso de cuando arrancamos. Siempre tengo presentes los descensos porque para saber disfrutar también hay que sufrir en ciertos momentos, y nosotros sufrimos mucho el descenso. Después de ese golpe nos unimos, trabajamos mucho, mejoramos el juego y la armonía del club. Fue un muy buen proceso y esperamos poder continuar.
La Plata Rugby Club tuvo tres descensos en su historia desde que se eliminaron las reubicaciones. El más reciente fue en 2023 y al igual que en su primer descenso volvió tras un año en Primera A. En abril del 2025 comenzará el Top 12 y Francisco Albarracín buscará cumplir el objetivo de mantenerse, en un torneo que tiene una exigencia y un nivel rugbístico muy superior al experimentado en este año.
-¿Cómo está el club estructuralmente, en todos los aspectos de cara al URBA Top 12?
-A La Plata como club lo veo muy bien, desde la comisión directiva, la subcomisión de rugby y los distintos entrenadores en todas las divisiones. Hay una mancomunión que hace mucho tiempo no veía, esto sumado a una sinergia, un laburo en conjunto para planificar a largo plazo. En el corto plazo, ascender o descender marca mucha diferencia. Para mantenerse dependemos mucho del recambio de jugadores y del nivel de las camadas más chicas.
-¿Qué diferencias ves entre el nivel del Top 12 y Primera A?
-Es un torneo totalmente distinto, mucho más exigente en lo físico y en lo dinámico. Tenemos que mejorar el físico, las formaciones fijas, principalmente el scrum, y en la defensa tenemos que ser muy sólidos. En el Top 12 los rivales cuando te atacan te hacen un verdadero daño.
-¿Cuál es la planificación de cara al 2025 y lo que resta del 2024 sin competencia?
-Vamos a hacer una gira en la pretemporada, en febrero. Pero ahora hay un aspecto muy importante del rugby, cada vez más, que es mejorar la preparación física. Los jugadores ya empezaron a prepararse en el gimnasio, hasta fin de año, para llegar en mejores condiciones a la pretemporada de 2025. Es el momento de fortalecerse porque después durante la temporada es difícil aumentar la masa muscular. Estamos muy metidos en eso, en hacer una postemporada muy dura para el desafío que se viene en el 2025, que es mantenernos en el Top 12.