Por Manuel Martínez Cataldo
Manuela Bonomi tiene 18 años y participa en torneos provinciales en Buenos Aires desde 2017. En los últimos años logró clasificar a distintos torneos nacionales para los que debió viajar a Santa Fe y a Mendoza
-¿Cómo llegaste a practicar un deporte como la gimnasia artística?
–Arranqué de chiquita en el club donde hacía natación. Todos los días pasaba por la parte de gimnasia y me llamaba bastante la atención, hasta que decidí hacer el cambio de deporte en ese mismo club. Dejé natación y arranqué gimnasia, más o menos a los cinco, seis años. Al principio no fue tan difícil, pero después la dificultad fue aumentando.
-¿Crees que cualquiera podría practicar el deporte?
–Yo creo que sí, cualquier persona podría hacerlo. Eso sí, se requiere de mucha disciplina y mucha constancia. Las cosas en la gimnasia artística no salen de un día para otro porque son ejercicios muy complejos. Se requiere mucha fuerza, mucha flexibilidad, si no es muy difícil que salgan las cosas. Hay que estar bien preparado.
-¿Cuánta importancia sentís que tiene la salud mental en la gimnasia artística?
–Creo que es muy importante, más que nada en gimnasia que, como no es un deporte grupal, recae toda la responsabilidad y frustración en vos mismo. Hay muchos bloqueos mentales también en este deporte porque como no es fácil, hay muchas cosas en las que los miedos te terminan ganando. En las competencias influye un montón, y los deportistas de selección suelen trabajar con psicólogos deportivos, aunque no es mi caso.
–¿Cómo combinás tu entrenamiento con el estudio y el trabajo?
-Este año bajé un poco la carga horaria de entrenamiento. Yo el año pasado entrenaba cinco días, cuatro horas por día, y ahora que arranqué la facultad y a trabajar tuve que bajar un poco la carga horaria y hago tres días, cuatro horas por día. A la mañana trabajo, a la tarde entreno y después a la noche estudio.
-¿Tener tanta carga horaria te desmotiva para seguir entrenando?
-La verdad que no. Como es un deporte que me gusta, si fuese por mi tendría la carga horaria que tenía antes. Me gustaba entrenar bastante, más que nada porque yo soy una persona muy activa y me gusta hacer deporte. Por cuestiones de trabajo tuve que bajar un poco, porque tenía días que sí iba desmotivada durante la semana a entrenar.