Por Nicolás La Rocca Bareta
Hace una semana finalizaron los Juegos Paralímpicos de París 2024. 4400 atletas, 182 países, 22 deportes y 549 pruebas con medallas fueron los principales aspectos de esta competición internacional. Como sucede usualmente, China, Estados Unidos y Gran Bretaña dominaron el medallero con amplia diferencia. Sin embargo, algunos países también demostraron un gran crecimiento y tuvieron un destacado rendimiento; uno de ellos fue Argentina.
La delegación albiceleste contó con un total de 70 participantes en la capital francesa y obtuvo 13 preseas: dos doradas, tres plateadas y ocho bronceadas. Esta fue la mejor actuación de los últimos 44 años; la anterior había sido en los Juegos de Arnhem, Países Bajos, de 1980, en la que se consiguieron 15 galardones. A continuación, un repaso de los coronados de gloria en París.
Iñaki Basiloff, el neuquino de 23 años, desplegó una performance brillante a lo largo de todo el evento. Por un lado, obtuvo una medalla de oro en natación, en los 200 metros combinados SM7 (clasificación en la que los participantes tienen una función limitada en la/s pierna/s). En una electrizante y cambiante carrera, en la que venía en mitad de tabla, logró quedarse con el primer puesto gracias a un sorpresivo sprint sobre el final. El argentino culminó con un tiempo de 2m29s81 y dejó atrás, entre otros, al ucraniano Andrii Trusov, que posee el récord mundial, .
Por otro lado, Iñaki consiguió otra distinción, en este caso de bronce y en los 400 metros libre S7. Dominaba la serie, pero en la última etapa fue superado por Trusov y el italiano Federico Bocelli. Los números del argentino arrojaron un tiempo de 4m40s27. El nadador se convirtió en el primer competidor de este país en subirse al podio dos veces en los mismos Juegos Paralímpicos desde Río 2016.
Los Murciélagos, el seleccionado argentino masculino de fútbol para ciegos, ganaron la presea plateada. El equipo dirigido por Ariel Figueroa y Enrique Bertoni superó la fase inicial luego de igualar sin goles contra Marruecos y Colombia, y tras triunfar ante Japón 1 a 0. En las semifinales concretaron una hazaña. Después de empatar 1 a 1 en el tiempo regular, derrotaron a Brasil 4 a 3 en los penales, consumando así la primera derrota de la verdeamarela en la historia de la competición. La final fue contra Francia, el partido, parejo y sin muchas situaciones de gol, terminó con el resultado entablado en uno. Los penales fueron protagonistas una vez más; en este caso, los Murciélagos cayeron pero quedaron con una medalla plateada.
Nacido en Cinco Saltos, Río Negro, Hernán Urra se quedó con la de plata en lanzamiento de bala F35 (atleta con movimiento y coordinación de las piernas moderadamente limitadas). Su ejecución fue de 15.90 metros y, gracias a ella, se convirtió en el récord argentino de esa disciplina. Estuvo a solo 0.23 metros del competidor uzbeko, Khusniddin Norbekov, que se adueñó del primer lugar. Con este logro, el lanzador acumula tres Juegos Paralímpicos seguidos sumando medallas; Río 2016, Tokio 2020 y París 2024.
Alexis Chávez, el atleta oriundo de Pergamino, provincia de Buenos Aires, se llevó un galardón plateado en la final de los 100 mts de velocidad, luego de una definición infartante que se determinó por photo finish. El corredor albiceleste realizó un tiempo de 11.88 segundos y, con él, una remontada extraordinaria al final, para dejar a su colega chino Yifei Yang en la tercera posición. Además, lo separaron nada más que 0.03 segundos de James Turner, el ganador de la serie.
El deportista bonaerense no se quedó conforme y fue por más. En los 400 metros de atletismo consiguió la medalla de bronce. Tras una carrera sensacional en el Stade de France, Chavez con un tiempo de 53.60 segundos superó el récord continental y mejoró su marca personal.
Uno de los atletas más destacados de los Juegos fue Brian Impellizzeri. El rosarino de 26 años se subió a lo más alto del podio en la prueba de salto en largo. Su marca llegó a los 6.42 metros en la categoría T37 (atletas que tienen el movimiento y la coordinación moderadamente limitados en un lado del cuerpo). Los rivales más cercanos que lo acompañaron en el podio saltaron ambos 0.20 metros menos que el triunfador.
Argentina logró consagrarse por primera vez en la historia del deporte adaptado en boccia, una modalidad que se practica de forma individual o por parejas, sobre una cancha rectangular, en la que los jugadores deben lanzar sus bochas lo más cerca posible de una pelota blanca. La entrerriana Stefania Ferrando y el marplatense Rodrigo Romero fueron los encargados de concretar esta epopeya. En el juego por el tercer puesto derrotaron a la dupla tailandesa Ladamanee Kla-han y Akkadej Choochuenklin por 4 a 2 y obtuvieron la medalla de bronce.
Gustavo Fernandez prolongó su leyenda en París 2024. Después de perder en las semifinales contra el japonés Tokito Oda, el argentino tenía una última oportunidad para no irse con las manos vacías del torneo y le sacó provecho. Venció en el estadio Philippe Chartier de Roland Garros al español Martín de la Puente por 6-1 y 6-2, y ganó la medalla de bronce. El cordobés, que supo ser número uno del planeta en 2017, consiguió la primera distinción de este deporte en los Juegos Paralímpicos para Argentina y también para su cuenta personal.
Paula Gómez, la judoca de Merlo que compite en los -57kg, le dió otra chapa bronceada a la delegación albiceleste. Igualó 1-1 en el tiempo regular con la canadiense Oriscilla Gagne y en el punto de oro, debido a las 3 faltas que acumuló su rival, se aseguró el tercer lugar. Argentina volvió a alcanzar una medalla en este arte marcial doce años después de las conquistas de David Effron y Jorge Lencina en Londres 2012.
Antonella Ruiz Diaz, de Gualeguaychú, Entre Ríos, también brilló en Francia y consiguió una presea por su tercera posición en lanzamiento de bala F41 (atletas de campo de baja estatura). Con un registro de 9.50 metros, la entrerriana quedó por detrás de Kubaro Khaminova de Uzbekistán (plata) y Raua Tlili de Túnez, quien se adjudicó la de oro. Cabe destacar que Ruiz Díaz también superó su propio récord, conseguido en la edición anterior de los Juegos en Japón.
Argentina logró otro bronce después de que Juan Samorano venciera 6-5 al uzbeco Javokhir Alikulov en el cruce directo por la presea de bronce para taekwondo, dentro de la categoría -70kg K44. En una lucha intensa y reñida, supo sacar provecho de su experiencia y sumó otro logro a los obtenidos en las Paralimpiadas de Tokio 2020 y los Parapanamericanos de Santiago 2023.
El atleta Fernando Vázquez consiguió otra medalla para la Argentina en los Juegos Paralímpicos de París 2024, al quedarse con el tercer lugar en salto en largo T12 (atletas con capacidad visual reducida). El cordobés obtuvo la medalla en el último salto, con el que registró una marca de 6.88 metros y superó por tres centímetros al malasio Kar Gee Wong.
Luego de que se concretara la decimoséptima participación de Argentina en los Juegos Paralímpicos, siendo la primera en Roma 1960, el mejor rendimiento del seleccionado albiceleste sigue aconteciendo en las paralimpiadas de Tel Aviv, Israel, de 1968. La estadística marca que el país sudamericano consiguió 30 chapas: diez de oro, diez de plata y diez de bronce. Entre los deportistas más destacados de ese certamen se encuentran tres mujeres: Silvia Cochetti, con 8 medallas distribuidas en natación, baloncesto y atletismo; Dina Galindez, quién consiguió 6 placas entre baloncesto y atletismo; y Susana Olarte que obtuvo 5 distinciones divididas también en baloncesto y atletismo.
Con las 13 medallas alcanzadas en los recientes Juegos, Argentina suma una cantidad de 178 preseas con 33 doradas, 69 plateadas y 76 de bronce en toda su historia. En 2028, los deportistas albicelestes tendrán la oportunidad de seguir sumando triunfos. Los Juegos Paralímpicos se llevarán a cabo en Los Ángeles, celebrándose por tercera vez en Estados Unidos, las otras dos, Nueva York 1984 y Atlanta 1996. Además, a partir de ese año habrán 23 deportes en lugar de 22, dado que La Junta Directiva del Comité Paralímpico Internacional (IPC) aprobó en su reunión con el Comité Organizador, la propuesta de incluir la escalada en el programa de competición.