sábado, septiembre 7, 2024

Sepúlveda: viento en contra, comunidad a favor

Por Isidoro Doumont

En Chubut, más específicamente en Rawson, una ciudad portuaria sin tradición ciclista, se encuentran una ferretería y un mayorista que no solo venden herramientas y productos, sino que también fueron claves en la formación del ciclista Eduardo Sepúlveda, que estará presente en los Juegos Olímpicos de París 2024.

Desde muy chico, las bicicletas ya eran parte de su vida. Aunque fue en 2007 a sus 15 años después de la muerte de su padre en un accidente automovilístico en la Ruta Nacional 251, a 420 kilómetros de Rawson, cuando volvían de una competencia en Bragado, donde decidió tomar el ciclismo de forma profesional: “Cuando decidí que quería competir a nivel profesional, me di cuenta de que necesitaba más que solo pasión, necesitaba apoyo”, comentó Sepúlveda en una entrevista con Infobae.

Fernando Rosa, dueño de Ferretería Argentina SRL, dijo a El Equipo cómo comenzaron a apoyarlo: “Eduardo Sepúlveda arrancó corriendo en bicicleta en Rawson con su padre, y cuando comenzó a competir en los campeonatos nacionales, lo ayudábamos todos los meses con un dinero”.

El ciclismo de ruta es una disciplina exigente que combina resistencia, velocidad y estrategia, siendo desafiante en países como Argentina, donde el deporte no tiene la misma tradición ni infraestructura que en Europa. En la provincia de San Juan, el ciclismo es casi una religión, ya que tiene el calendario ciclista de pista y ruta más intenso e importante del país. Pero en Rawson, las rutas presentan sus propios desafíos. Aunque pintorescas, las condiciones pueden ser extremas, con vientos fuertes y temperaturas bajas, mucho más en invierno. Pero a pesar del frío, la calidez de la comunidad rawsense fue muy importante en su carrera como ciclista.

La relación entre la familia Sepúlveda y la ferretería era más que comercial. Se había establecido una conexión de confianza: “La familia es cliente habitual y en la ferretería siempre colaboramos con un montón de chicos de la zona que quieren crecer, y en este caso Eduardo Sepúlveda fue uno de ellos”. La buena predisposición de ambas partes estableció una relación duradera.

Fernando Rosa también contó que siempre que Sepúlveda visita la zona es muy agradecido y les cuenta sobre sus avances en el ciclismo y dijo a El Equipo que Sepúlveda reconoció la ayuda brindada: “Cuando se fue a correr al Movistar Team en 2018, volvió a Rawson, agradeció el apoyo y dijo que no necesitaba más la ayuda porque había conseguido un buen equipo”.

Otra persona importante para el impulso de la carrera de Sepúlveda fue Fredy Valdez, dueño del supermercado mayorista, la Superferia, quien le dijo a El Equipo cómo lo ayudaron desde el anonimato para pagar la pensión en la que estaba viviendo en Buenos Aires: “En 2011 Rodolfo Lucero y Fabián Gusman junto a otras personas, organizaron asados y carreras de bicis para ayudarlo en la parte económica, donde la Superferia ayudó con la mercadería”.

En el caso de Valdez también mantuvo una relación cercana con la familia Sepúlveda: “Tenía relación con su padre y a Edu lo conozco desde chico. Siempre supe que iba a triunfar en el ciclismo por su dedicación, constancia y condiciones”. También destaca su cercanía por la ayuda: “Estamos en contacto con él y cuando viene por la zona siempre contamos con su visita”.     

En 2012, Sepúlveda demostró su potencial al ganar la medalla de plata en la prueba contrarreloj de los campeonatos panamericanos de ciclismo de ruta y se consagró como el mejor sub-23, obteniendo la medalla de oro. Al año siguiente, en 2013, consiguió dos medallas de oro en ciclismo de pista, consagrándose campeón en persecución individual y por equipos.

La ayuda que recibió le permitió entrenar, competir y destacarse en el ciclismo nacional e internacional. Sepúlveda ha mencionado en una entrevista con la página oficial de los Juegos Olímpicos, que sin el apoyo de su comunidad, no habría llegado donde está hoy: “Esos primeros años, cada competencia era un reto financiero, pero siempre había alguien dispuesto a ayudar”.


Su carrera continuó en ascenso, y en 2016 completó el exigente Tour de Francia y representó a Argentina en los Juegos Olímpicos de Río 2016.

Su esfuerzo y dedicación fueron reconocidos en 2020, cuando recibió el Premio Konex como uno de los cinco mejores ciclistas de la última década en Argentina. Incluso la pandemia no lo frenó, ya que también participó en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. A fines de 2022, firmó contrato con el equipo belga Lotto Dstny, uno de los mejores y más longevos equipos de ciclismo, hasta la temporada 2026, logrando ser el primer argentino en correr en ese equipo. 

El 26 de agosto de 2023, marcó otro hito en su carrera al participar por primera vez en la Vuelta a España, completando así su participación en las tres grandes vueltas del calendario que son el Giro d’Italia, el Tour de France y la Vuelta a España.

El reciente logro de Eduardo Sepúlveda, clasificándose para los Juegos Olímpicos de París 2024, es una muestra del poder del apoyo comunitario y de cómo una red de personas y pequeños negocios pueden ayudar a alguien a alcanzar sus sueños, inclusive con el granito de arena más chiquito.

 

 

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