Por Diego Stoler
Este fin de semana no será uno más del montón para los fanáticos del deporte, ya que en la Copa de la Liga Profesional del Fútbol Argentino se disputará la “fecha de los clásicos”, una jornada en la que los clubes de la primera división se enfrentan a sus rivales durante el transcurso de cuatro días.
Para colmo, uno de los condimentos extra que hay en estos enfrentamientos será el contexto en el cual se llevará a cabo el clásico santafesino. Tanto Unión como Colón llegan ambos con 37 puntos en la tabla general, a un punto del único descenso por ese medio.
Este no es el primer caso en el cual un clásico rival puede colocar al otro en puestos de descenso o promoción, pero sí tiene la particularidad de que los dos tienen ambas opciones de bajar de categoría. Una derrota para los dos los puede condenar al descenso, ya que además del resultado, esta derrota significa un bajón tanto moral como anímico para cualquier equipo.
Un hecho parecido con el clásico santafesino sucedió en el año 1989, en donde el Sabalero y el Tatengue disputaron el último ascenso a Primera División. En esa ocasión, Unión venció a Colón en ambos encuentros de la final del reducido, 2-0 en el “Cementerio de los Elefantes” en la ida y terminó de sellar su ascenso con el 1-0 de local en el Estadio 15 de Abril. De esta manera el Tate consiguió el ascenso y condenó a Colón a disputar un año más en la segunda división.
Otro suceso fue en el año 1983, cuando en la última fecha del campeonato Metropolitano se enfrentaron Independiente y Racing. En esta ocasión, el Rojo llegaba a la última fecha en una situación diversa al de su clásico rival, de obtener la victoria salía campeón, con el condimento adicional de que la “Academia” ya había dictaminado su suerte siendo uno de los equipos que ese año perdía la categoría. De esta manera el Rojo obtuvo la victoria por 2-o y no sólo festejó el título, sino que también el primer descenso de su rival de toda la vida.
Ésta fecha Racing tuvo la chance de devolverle el favor al Rojo, en esta ocasión la Academia jugando de local tuvo la oportunidad de complicar a Independiente en la tabla general, en la cual hasta el partido se encontraba con 39 puntos, a tres de la zona de descenso. Una derrota hubiese complicado mucho a los dirigidos por Carlos Tévez, ya que sus rivales por la permanencia aún no habían disputado sus encuentros. Con esta victoria escala a 42 puntos y no solo se escapa del descenso, sino que ahora aspira a clasificarse a la zona final de la Copa de la Liga y poder soñar con el título.
Colón y Unión se enfrentarán en el estadio Brigadier Estanislao López a las 16:30 por la séptima fecha de la Copa de la Liga, en lo que será un encuentro clave en la lucha por el descenso.