jueves, noviembre 21, 2024

La ecuatoriana que defiende los colores de Argentina como si fueran suyos

Por Paula Prieto

La Selección Argentina de vóley femenino se despidió del Preolímpico en Japón el domingo a la madrugada con tres triunfos y cuatro derrotas, luego de ganarle a Perú con parciales de 20-25, 25-12, 10-25, 25-18 y 15-10. El conjunto de Daniel Castellani quedó afuera de la primera fase clasificatoria a los Juegos Olímpicos 2024 debido a que terminó en el 5° lugar del grupo B encabezado por Turquía y Japón. Las cinco plazas restantes se decidirán al final de la Fase Preliminar de la Liga de Naciones de Voleibol 2024 y serán los cinco mejores equipos aún no clasificados del ranking mundial, lo que deja a la Albiceleste con pocas chances para sumar puntos y avanzar del puesto número 18. De igual manera, Las Panteras tuvieron un excelente paso por este torneo y hubo un nombre que volvió a sonar en los oídos de los argentinos, y aún más en el último partido dónde reapareció siendo la tercera máxima anotadora con 10 tantos. 

Erika Mercado, opuesta del seleccionado argentino, hace 16 años vino a la Argentina para poder cumplir su sueño, el mismo que su mamá también tuvo y sus padres no le dejaron concretar. Desde Ecuador, con tan solo 15 años, llegó para poder seguir su carrera en el vóley. Toda su vida se la pasó yendo de deporte en deporte, jugó intercolegialmente al básquet, practicó atletismo, pero el vóley fue lo que la enamoró. Solo tenía conocimiento básico del deporte cuando se encontraba jugando un torneo de selección de talentos en su país natal. Esta demostración fue la necesaria para que el entrenador argentino Sebastián Carotti viera talento en ella. La oportunidad de su vida había llegado y su familia no dudó ni un segundo para apoyarla en lo que quería hacer. Al principio se le hizo difícil acostumbrarse a la manera tan diferente que tenían los argentinos para jugar, pero con esfuerzo y trabajo logró con 16 años comenzar su carrera en Gimnasia y Esgrima La Plata. 

San Lorenzo no solo fue el segundo club por el qué pasó y con el que ganó tres títulos en dos años, sino que también fue como un hogar para ella gracias a la ayuda que recibió en una de las batallas más difíciles que peleaba a distancia: la casa de su madre había sido derrumbada luego de un terremoto de 7,8 grados en la zona costera de Ecuador y el club decidió hacer una  rifa para recaudar plata y poderle comprar una casa.

En 2018 recibió lo que había esperado toda su vida, la nacionalidad argentina. Esto significaba que podía ponerse y representar la camiseta celeste y blanca que tanto esperaba hacer. 


“Me encanta esta camiseta y desde que vine, tuve el objetivo de jugar para Argentina”, había declarado en los medios.

Esa niña de 15 años que había venido a la Argentina sola y sin saber lo que el futuro le esperaba, terminó jugando sus primeros Juegos Olímpicos en Tokio 2020, en los que fue la máxima anotadora de la selección con 59 puntos. Fue parte del primer equipo de la Selección Argentina femenina en pasar a la segunda ronda de un Mundial en Polonia y Países Bajos en 2022, en el que también fue la máxima anotadora con 123 unidades, marca que jamás se había visto en la historia de la Albiceleste y además fue una de las jugadoras que participó en la histórica primera obtención de la Copa Panamericana 2023, luego de 20 ediciones. 

Todavía está en duda la participación de las argentinas en Francia el año siguiente pero con la cabeza enfocada en mejorar para asegurar su lugar en los Ángeles 2028, se espera que con 36 años Erika Mercado siga sorprendiendo con su fuerza en los ataques y logre traer la primera medalla para su segundo país, que defiende y ama como propio. 

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