Por Franco Zabala
Finalizó el Campeonato Nacional de natación de la categoría cadetes, que tuvo lugar en la pileta del Parque Roca. La ex sede de los Juegos Olímpicos de la Juventud Buenos Aires 2018 albergó el certamen más importante a nivel país, para los competidores y competidoras que están al borde de dar el paso a la primera categoría de la natación.
Entre los cientos de nadadores inscriptos a la edición invernal de este Campeonato Nacional, se mezclan los juveniles “1”, quienes cuentan con 16 años, y los juveniles “2”, subdivisión en la que caben tanto los de 17 como los de 18.
Es un torneo al cual se le debe prestar atención debido al rango etario que reúne. A esta edad, es imposible determinar el techo de cualquier competidor, ya que son años muy vertiginosos en cuanto a lo físico y mental; aunque sí se pueden ver aquellos nadadores que dejan atrás el título de “promesas” y pasan a tener el de “realidades”.
Es menester hacer hincapié en que, si bien los competidores de este certamen pueden contar con un cuerpo desarrollado, tiempos bajísimos, y hasta un palmarés extenso, ninguno aún es considerado como “mayor” para el deporte.
Este campeonato tuvo el atractivo particular de ser una de las últimas chances clasificatorias de cara al Campeonato Sudamericano juvenil que se hará en esa misma pileta, a mediados de septiembre. Otro torneo que cierra sus puertas pronto es el Campeonato Mundial juvenil, el cual se hará en Netanya, Israel, en el mismo mes.
Algunas de las estrellas que brillaron en este nacional bajaron de la cima de sus podios, y comentaron sus apreciaciones finales con respecto a su rendimiento. El criterio de los entrevistados seleccionados fue el de no repetir competidores de una misma federación, y que hayan ganado al menos dos medallas de oro en pruebas individuales.
No es secreto que muchas figuras del torneo quedaron por fuera de la nota, por poner algunos ejemplos: Ignacio Stambuk, Fiamma Carrillo, Francisco Carrocia y Magdalena Portela, y faltaría mencionar un par más.
Christen, Julia
Oriunda de la localidad santafesina de Esperanza y representante del Lawn Tennis Club de su misma ciudad. En el nacional se llevó las medallas doradas de los 100 y 150 metros pecho, y la medalla de plata de los 200 metros pecho. Es categoría juvenil “2”.
Con 18 años, Julia se afianzó como una de las pechistas titulares del seleccionado juvenil, especializándose más que nada en las carreras de 100 y 150 metros. En esta última, además de campeonar, se llevó, con su tiempo de 32 segundos con 24 centésimas, la única marca clasificatoria al Mundial juvenil de todo el torneo.
“Yo busco la perfección en las carreras, aunque siempre va a haber algo que te va a salir mal. Los 50 son una prueba que no te permite margen de error”, definió la velocista.
Desde que arrancó en la competencia tuvo una predilección por la velocidad explosiva, además de un talento innato, el cual ayudó a desarrollar el fanatismo por este metraje.
“Cuestión mundial, estoy muy contenta ya que tengo un buen porcentaje para que me lleven. La clasificación marca todo el esfuerzo que yo tengo atrás y todos los entrenamientos duros. Se podría decir que conseguí lo que fui a buscar”, declaró la bicampeona y recordista nacional, al ser consultada por el balance de su rendimiento.
Su próximo objetivo a corto plazo tiene fecha y lugar: el 27 del próximo mes, cuando será el último clasificatorio a los Juegos Panamericanos de Santiago. “Voy a volver a Buenos Aires para el clasificatorio al Panamericano. Tengo posibilidades de ir y quiero intentarlo, pero si no sale, no sale”, comentó la santafesina.
Un poco después, tiene marcados en el calendario tanto el Mundial de Netanya, como el Sudamericano en el que será local.
Augusto Lima, Artur
Nacido en el estado de Fortaleza, Brasil, una de las promesas más prometedoras del semifondo libre; actual campeón de 100, 200 y 400 metros libres. Representante del Club San Fernando, categoría juvenil “1”.
Con apenas 17 años, Artur ya supo participar de dos viajes con el seleccionado argentino, y tomó la elección de su bando a una muy temprana edad. “Nunca voy a dejar de decir que soy brasileño de sangre, pero cuando va a natación, voy a ser argentino, porque es donde surgió mi competencia”, confiesa el joven campeón. En su elección prima la Argentina por sobre su tierra natal, y apunta como sueño el hecho de dejar a la nación rioplatense lo más alto posible.
Es especialista en los 200 y los 400 metros libres, rechaza las carreras excesivamente cortas debido a que no le permiten hacer uso de su técnica. “Mi estilo de nado hace que no me lleve bien con los cincuenta. Mi técnica no es la de un velocista, ellos revolean muy rápido los brazos, la mía es de un nado más largo, más eficiente”.
De cualquier forma, aunque todo apunte a que podría destacar en las carreras de fondo, el representante de San Fernando descree de las recomendaciones de su entrenador, y asegura que no podría rendir de la misma forma en una carrera de 1500 u 800 metros.
Riguroso y duro con un rendimiento que lo dejó a centésimas de la marca clasificatoria al Sudamericano, no puede evitar sentir un gusto amargo con respecto a los tiempos que obtuvo.
Tras un 2022 excelente, y un Sudamericano en el que logró reducir por más de cinco segundos su mejor marca de 400 metros libres, Artur se estancó, y solo en este torneo, casi un año después, pudo volver a restar segundos en la prueba; aún con este nuevo tiempo, al salir de la pileta sintió que no había podido dar todo lo que tenía para ofrecer. “Para mí pude haber hecho cuatro minutos y cinco segundos, o cuatro minutos y seis segundos”, cerró.
Con esta maravillosa e intachable actuación de dominio en todo lo que corrió, Artur se despide hasta nuevo aviso de la capital del país, ya que no cree volver para el clasificatorio a los JJPP del próximo mes.
Cazau, Ulises
Oriundo de La Plata, hincha del León, representante del equipo ADN Montego, de su ciudad. Nacido en 2006, actual campeón de los 50 y 100 metros mariposa.
Con un despampanante tiempo de 54 segundos con 89 centésimas, el mariposista platense selló su plaza para el Sudamericano. Por si esto fuera poco, en los 50 metros del mismo estilo, se quedó a sólo 11 centésimas del récord de la categoría, el cual le pertenece al olímpico Santiago Grassi, y a 28 de sacar boleto para el Mundial juvenil.
– ¿Qué vas a buscar al Sudamericano?
– Uno siempre aspira al podio, pero voy a buscar mejorar mis marcas personales. Obviamente me encantaría sentir lo que es ser campeón sudamericano, pero en estas instancias quiero disfrutar el torneo, bajar los tiempos, y correr las postas, que es en lo que más flojo estoy.
Los tiempos, la radical bajada de los mismos, no fueron una sorpresa para el bicampeón argentino, quien por probar una estrategia de cero respiraciones, no pudo acomodarse bien en las eliminatorias, y había depositado una gran cantidad de expectativas para los 50 metros en los cuales venció.
En donde sí se volvió impredecible, incluso para su propia figura, fue en los 100 metros mariposa; donde si bien tenía planeado encontrarse con la marca mínima para entrar al Sudamericano, ni en sus mejores sueños cabía la chance de bajarla por más de medio segundo.
Como todo seguidor de la enseñanza de Zubeldía y el doctor Bilardo, el mejor mariposista juvenil de la actualidad, es cabulero. A la hora de las finales, siempre realiza la entrada en calor en el andarivel en el que le toca correr la serie; y en la precompetencia no le puede faltar su pequeño bolso atiborrado de provisiones para no deshidratarse antes de correr.
El platense aseguró que estará de vuelta, listo para dar más cátedra de cómo es que se nadan las carreras de velocidad, en el último clasificatorio a los Panamericanos, donde intentará hacer una hazaña por partida doble:
– ¿Vas a volver al clasificatorio dentro de un mes?
– Sí, por supuesto. Seguramente vayamos a este selectivo, obviamente la marca es muy complicada, requiere bajarle el récord a un referente como lo es Santiago Grassi, pero bueno, ese es uno de nuestros objetivos; primero bajar el récord, y si es posible, lograr esta marca que es aún más baja que el récord.
Desde la redacción de la nota, se insta que no se pierdan los 50 mariposa de ese torneo, donde estará presente el actual poseedor del récord, y se podrá presenciar el nacimiento de un nuevo legado del estilo.
Fernández, Iara
Representante del Club Atlético River Plate, nacida en el año 2006, en la localidad bonaerense de José Carlos Paz. Actual bicampeona de los 50 y 100 metros espalda; tercer puesto en los 200 metros del mismo estilo; y medalla de bronce en los 50 y 100 metros libres.
Tras un par de temporadas de menor rendimiento debido al periodo pandémico, Fernández retomó la vieja costumbre de pisar los podios nacionales, y consumó un bicampeonato argentino con doble marca clasificatoria al Sudamericano juvenil. En el caso de concretarse la convocatoria, esta será la primera vez que la bonaerense defienda la bandera.
“Después de la cuarentena me deprimí mucho, tuve todo un tiempo durante el cual no tenía motivación alguna, hasta que me cambié a River. Ahora se empezaron a dar las cosas de vuelta”, describe la espaldista.
Al ver que le sobró paño para las marcas mínimas de Sudamérica, Iara confirmó que buscará la clasificación a los Juegos Panamericanos, en el mencionado último clasificatorio. La marca mínima es de un minuto, tres segundos y setenta y cuatro centésimas, hasta ahora la única que la consiguió fue Andrea Berrino. Este tiempo marca una diferencia de solamente cuarenta y siete centésimas entre la marca que estableció Fernández, y la que se pide para entrar a Santiago.
En cuanto a las pruebas de su programa, tiene una fuerte preferencia por los 100 y 50, los cuales le resultan más simples que los 200, debido a su baja experiencia. “No sé bien cómo son los 200. Paso los 100 y se me borra la mente. En los 100 es todo más explosivo, me tiro a morir y vuelvo, de alguna forma tengo que volver”, sentenció.
En cuanto a los 50, corre con la destreza de cualquier velocista: la facilidad en el subacuático. Aprovecha la ductilidad de su biotipo y explota esa ventaja para poder adelantarse unos metros al comienzo de la carrera.
Un torneo con resultados inesperados, y un balance cuya única negatividad es el resultado de los 100 libres. Más allá de eso, las dos balas de plata que le quedaban a Fernández, en lo que fue su última posibilidad de clasificarse a un Sudamericano juvenil, fueron acertadas por igual.
Sacchi, Valentino
Nacido en 2007, en donde está el agite. Representante de la Sociedad Italiana de Tiro al Segno, más conocida como SITAS, es el actual campeón de todas las pruebas de espalda de su categoría, y subcampeón de los 400 metros combinados.
La planificación que comenzó el nacional pasado tuvo sus frutos, “Sacchito” como lo apodan sus amigos y compañeros, se robó el reflector y se consagró como el mejor espaldista de los juveniles “1”.
Este campeonato fue redondo para el nadador del SITAS, quien logró instaurar tres nuevos récords personales, uno por prueba de espalda corrida, y ganada.
Su prueba predilecta, los 200 metros espalda, fueron el foco de atención tanto para él como para su entrenador a lo largo del año de preparación que se tomaron. Además de las medidas técnicas para mejorar los detalles, los cuales presentaron amplias mejorías desde el principio del período, Sacchi cambió la estrategia para correr.
En lugar de correr desde atrás, es decir, intentar sobrepasar a su rival para conseguir la victoria, esta vez jugó a arrancar fuerte y tolerar la primera posición. Todo esto, apoyado en sus brazos y su agarre con los mismos, debido a que todo lo que implique un uso de tren inferior es más difícil para Valentino.
Sin embargo, no hay blanco sin negro, y como a todo nadador que se fundamenta en el fondo, a Valentino le cuesta la explosividad. Sus pasajes de 100 son increíblemente parejos, lo que principalmente significa que no logra explotar en los primeros metros de carrera, más si puede aguantar los últimos.
El nadador de la Sociedad Italiana no logró clasificarse para ningún torneo internacional, aunque se debe remarcar que, según lo indica su proyección, aún le queda una chance más, donde tendría grandes posibilidades. Los Sudamericanos se llevan a cabo cada dos años, lo que significa que los nacidos en año impar consiguen tres posibilidades de clasificarse: dos en posición de desventaja, con la obligación de clasificarse como los más chicos de la categoría; y uno en el que son los más grandes. A “Sacchito” le falta aún ese último intento.
El orden natural de las cosas es justamente este, que los nadadores mayores se clasifiquen a los torneos por sobre los menores, debido a que hasta que los cuerpos no maduren del todo, cada año de crecimiento significará incrementos de fuerza abismales. Tanto Augusto Lima como Sacchi son casos destacados que golpearon una puerta antes de lo planeado.
Al consultarlo por algún déficit o punto negativo de su rendimiento final, no pudo nombrar ninguno. “Me voy realmente conforme de este nacional”, agregó. Con la mente puesta en vacaciones y una relajación más que merecida luego de haber finiquitado un nacional espléndido, el nadador de la Federación de Natación del Oeste confirma su baja para el clasificatorio de julio, y promete volver al Parque Roca solo en el próximo argentino open.
Fotos: CADDA