Por Leandro Manganelli, Santiago Gutiérrez, Iñaki Porto, Bautista Brañas y Bautista Manterola
El fútbol no tiene fronteras y las peñas son un ejemplo de cómo la pasión por un club puede ser compartida por fanáticos que viven a miles de kilómetros. Ese es el caso de la Peña Madridista Argentina, la única del Real Madrid en el país.
Se formó en 2010 como una simple juntada de ocho hinchas, que se difundió de boca en boca y después por Facebook. Hoy superan, en la mayoría de las veces reuniones, las 40 personas y, a pesar de estar a más diez mil kilómetros del Santiago Bernabéu, su pasión se asemeja a la de los hinchas madridistas.
El bar La Puerta Roja, en el barrio de San Telmo, es el lugar fijo que tiene la Peña Madridista Argentina para disfrutar de su mayor pasión, el Real Madrid. Los hinchas se desenvuelven en el lugar como si estuvieran en la tribuna: gritos, golpes, cánticos y aplausos. “Ha sido el bar que más cálidamente nos ha recibido. No muchos bares se bancarían que estuviesen golpeando las mesas o que se grite tanto”, dice Renato López, actual presidente de la Peña Madridista Argentina, de sangre salvadoreña y española. “En sus comienzos la peña fue nómade e íbamos de bar en bar solo para ver al Real”, agrega.
A finales de 2021 la peña llegó al bar La Puerta Roja y lo adoptó como su sede, en parte por la buena respuesta de los responsables del lugar y también “por cábala”. Desde que empezaron a ver la Champions League en el bar no habían perdido ninguna serie hasta las semifinales con el Manchester City en la edición 2023. El bar no sólo recibe a la Peña Madridista Argentina, sino también a las peñas del Tottenham, Bayern Munich y Juventus. “Nos gusta y nos conviene que vengan”, dicen los responsables del bar.
El hecho de tener un lugar fijo ayuda a la peña para que turistas madridistas o de otra parte del mundo puedan integrarse al grupo, favorecer su fama a nivel internacional y, a la vez, cumplir con uno de los requisitos para convertirse en una peña oficial del Real Madrid, como tener una sede social, el actual objetivo de la Peña Madridista Argentina. Lo que le falta para ser oficial es que 25 de sus integrantes contengan el “carné madridista”, como indica la página del Real Madrid, que en términos argentinos serían 25 socios. “Queremos que se oficialice porque le daría a la peña muchos beneficios en cuanto a juntadas, patrocinios, eventos, carnets y productos”, dice a El Equipo Renato López.
Si bien la peña es argentina, entre la gente que asiste a ver los partidos hay suizos, italianos, venezolanos, daneses, colombianos y españoles, entre otros. El 28 de mayo de 2022, más de 350 personas se reunieron en el bar Pier (que es más grande que La Puerta Roja), también en San Telmo, para vivir la final de la Champions League contra Liverpool. El bar no tenía capacidad para tantas personas, pero hinchas de Bahía Blanca, Rosario y otras ciudades del interior del país se sumaron a la fiesta madridista.
A pesar de la rivalidad, el actual presidente elogia a la peña del Barcelona en Argentina (Penya Barcelonista Nicolau Casaus) por tener el carácter de oficial y transmitir un programa de radio propio. Pero la peña blaugrana tuvo una gran ventaja, que fue la presencia estelar de Lionel Messi en su equipo. Respecto a eso, Renato López dice: “Desde la peña hemos querido que vengan más argentinos para atraer más gente, para volver a conectar con el público. Si bien el Madrid tiene muchos de los mejores jugadores, hoy no tiene argentinos, que son los campeones del mundo”. En concreto, el Real Madrid solo tiene a Nico Paz, el juvenil que aún no debutó en Primera, nacido en Tenerife, pero que ya jugó en la Sub 20 de Argentina.
Cristiano Ronaldo y Messi marcaron 311 y 474 goles en la Liga española. El apoyo a Messi por parte de los argentinos se trasladó al Barcelona y aparecieron peñas blaugranas, pero el peso de Ronaldo y el lugar que se ganó como futbolista también irrumpió en Argentina. Ya no solo eran camisetas azules y rojas con el 10 de Messi en la espalda las que frecuentaban en las escuelitas de fútbol, sino también las casacas blancas con el 7 del portugués también se hacían notar.
“La competitividad que existía entre Cristiano y Messi era una cosa que atraía más gente; antes en las juntadas no podías ni caminar -recuerda Renato López-. Y el primer partido que recuerdo es el de Zidane metiendo la volea, fue mi primer recuerdo feliz”. La volea de Zidane en la final de la Champions League 2002 dio fe de que su fanatismo había nacido “desde la cuna”, con su familia materna hincha del Real Madrid.
¿Por qué un montón de personas que viven tan lejos de Madrid están fanatizadas? A veces son momentos de la vida que dejan marcas y generan amoríos, como el de Juan “Pipa” Gutiérrez, ex jugador de básquet argentino que jugó seis años en el CB Granada de España. “Soy hincha del Madrid, lo que me cambia el humor es el Real Madrid”, dice el Pipa Gutiérrez, bronce olímpico en Beijing 2008, y agrega que en básquet no es del Real Madrid: “Me tocó enfrentarlo muchas veces. Sigo el fútbol y soy hincha del club”.