Por Irina Lavallena @iirinistica y Magalí Robles
Era 12 mayo de 1963 y el Club Madureira, perteneciente a la Primera División de fútbol en Brasil, había visitado Cuba en una de sus giras por el mundo. El encuentro del 19 del mismo mes, frente al Combinado Habana en el Estadio Universitario, fue presenciado por el Che, quien bajó a saludar a los cariocas.
Como una honra hacia el líder revolucionario y hacia el fútbol mismo, en 2013, el club brasileño decidió estampar el emblema alrededor del mundo en su camiseta. La idea surgió con el motivo de recordar el 50º aniversario que se cumplía desde esa gira en 1967. Con la leyenda: “Hasta la victoria siempre” en la espalda, el equipo unió fútbol, ideas y revolución.
En el barrio Sierras y Parques de Jesús María, a casi 100 kilómetros de la ciudad de Alta Gracia donde Ernesto vivió gran parte de su adolescencia, chicos y chicas de a partir de los 12 años juegan al fútbol desde la pasión del deporte hacia el pensamiento revolucionario. El Club Social y Deportivo Ernesto Che Guevara existe desde 2006 sin cobrar cuota a los socios y sin publicidad en la camiseta, junto con la cara del Che.
“La camiseta del Che no se mancha”, sentenció la presidenta y fundadora del club, Mónica Nielsen, cuando algunos comerciantes pretendían comprar la indumentaria con el fin de usarla para publicitar sus negocios. El único sponsor que aceptan es al Comandante, la conocida imagen de su rostro va al frente mientras que en su parte posterior se puede leer su declaración “Hasta la victoria siempre”. Frase que grita cada categoría al momento de salir a la cancha.
El Che -así llaman al club- sobrevive sin cobrar cuota gracias al esfuerzo de los padres de los jóvenes deportistas, además de vender rifas, locro, empanadas: todo es bueno para seguir sustentando. “Los socios son para que se involucren. Los clubes son espacios de pertenencia que los noventa destruyeron, y contra eso también luchamos. El deporte es un derecho”, defendió la fundadora en una nota para la El Gráfico.
El 16 de diciembre el club cumple 11 años de existencia y de deambular por las canchas que alquila para hacer de local, ya que no tienen terreno propio. Sin embargo, ha logrado varias victorias deportivas e institucionales. La primera, en el ámbito del fútbol, fue el año pasado cuando el club se consagró campeón por primera vez en las categorías 2001/2002 y 2003/2004. Otro logro a nivel institucional fue el reconocimiento de la Sociedad Rural de Jesús María, por el trabajo hecho en los barrios más desamparados, que desde hace dos años presta el predio para los entrenamientos.
El rostro del Che incluso llegó a formar parte de una camiseta de Alta Gracia Rugby Club. El rugby, su gran pasión, y Alta Gracia, su pueblo de la infancia, también se unieron para homenajearlo. En 2013, el club utilizó la imagen emblemática de Ernesto como campaña de promoción de la institución.