Tatiana Milani @Tatmilani
En los días que ya transcurrieron del Mundial de Rusia 2018, cuatro de los jugadores convocados por cada una de sus selecciones vivieron la experiencia más linda que pueda transitar un hombre: ser papá.
Dos de ellos se enfrentarán mutuamente en uno de los partidos por lo cuartos de final. Por el lado de Inglaterra está Fabian Delph, quien luego del choque frente a Bélgica, se subió a un avión privado que le cedió la federación para que llegue a Londres, justo a tiempo, para el nacimiento de su tercera hija, pese a que se perdería el encuentro que debía afrontar contra Colombia. Enfrente está Suecia y su capitán Andreas Granqvist. La esposa de éste dio a luz horas antes de la confrontación con el país británico.
Sin embargo hay una gran diferencia entre ambos. El jugador sueco no viajó a conocer su hija ya que debe sí o sí jugar este partido, y si lo ganan continuar con la delegación hasta que termine su participación mundialista. En otras palabras, no conocerá a su nueva primogénita hasta que finalice la Copa del Mundo.
Los otros dos son Breel Embolo de Suiza y Jonas Knudsen de Dinamarca. El primero tuvo la suerte de poder viajar tres días que no le coincidían con ningún partido y regresar a tiempo para enfrentarse a Suecia. Sin embargo, el segundo tuvo mayores complicaciones ya que no llegó a presentarse al momento del parto porque justo estaba jugando su primera cita de un Mundial: la victoria frente a Perú. Aunque en recompensa, sus compañeros organizaron una colecta de dinero para poder cubrir los gastos del avión privado que lo llevaría a estar tan solo 24 horas junto su novia y su hija recién nacida.
Se puede observar que en cualquiera de los cuatro casos los días que se les da desde el lugar de trabajo a los padres es de un número completamente irrisorio. Pero esto no es algo que solo sucede en el fútbol, ya que en otros empleos y en otros países la licencia por paternidad es nula o muy baja para cualquier asalariado.
En Argentina, por ley, solamente son dos los días que tiene el padre para ausentarse en el trabajo, y que aún así le paguen el sueldo, y pueda acompañar a la madre en el proceso de cuidar al nuevo bebé.
“En un mundo de iguales, tampoco hay razón para que los padres compartamos tan solo dos días en el momento del nacimiento de nuestros hijos. Sabemos lo importante que es estar en familia en esos primeros días. Por eso vamos a presentar un proyecto de ley para extender la licencia por paternidad”, aseguró el presidente Mauricio Macri en la apertura de sesiones ordinarias del Congreso el primero de marzo del corriente año.
Esta es otra de las luchas que está combatiendo el feminismo para acortar la brecha de género y se espera que el mandatario cumpla con sus dichos. Ellos tienen el mismo derecho que las mujeres de enfocarse en los primeros meses de vida de su hijo sin tener que preocuparse por perder su empleo. Los hombres sí son necesarios para la crianza de los niños y su tarea no está solamente enfocada en su trabajo y en traer comida a la mesa, cosa que, en la actualidad, también lo puede hacer la madre.